La invasión israelí del Líbano

Israel lanzó ayer una importante invasión terrestre al sur del Líbano, desplegando tanques y tropas sobre la frontera en una importante escalada contra Hezbolá.

Un intenso fuego de artillería precedió a los primeros informes de enfrentamientos terrestres cuando las tropas israelíes se enfrentaron a militantes de Hezbollah atrincherados en posiciones defensivas.

El objetivo principal de la operación es desmantelar los sitios terroristas de Hezbollah, que ha estado lanzando ataques con cohetes que han desplazado a más de 60.000 residentes del norte de Israel durante los últimos 11 meses, según fuentes israelíes.

Israel informó a sus aliados estadounidenses sobre «operaciones limitadas centradas en la infraestructura de Hezbolá cerca de la frontera», confirmó más tarde el portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller.

Benjamín Netanyahu lanza una advertencia

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, criticó a Irán por cometer un «gran error» y amenazó con «pagar por ello».

Advirtió: «Detrás de este ataque también hay una mano deliberada y asesina: proviene de Teherán.

«Respetaremos la regla que establecimos: quien nos ataque, lo atacaremos».

Israel intercepta misiles después de que Irán lanzara un misils

Anoche, Israel fue alcanzado por un bombardeo sin precedentes de 180 misiles, lo que marcó una dramática escalada en el conflicto en curso con Irán y sus aliados regionales.

Las alertas se activaron en todo Israel el martes por la tarde después de que satélites estadounidenses detectaran que se estaban trasladando misiles balísticos a sitios de lanzamiento en el oeste de Irán.

Los sistemas de defensa israelíes interceptaron la mayoría de los cohetes mientras surcaban los cielos de Tel Aviv, Jerusalén y Haifa.

El ataque se produce pocos días después de que Israel asesinara al líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, una operación que ha inflamado aún más las tensiones en toda la región.